¡Descubre el secreto letal de los atropellos! No solo es culpa de la velocidad...

Se ha hablado mucho sobre la importancia de reducir la velocidad en zonas urbanas para evitar accidentes de tráfico que involucran a peatones. Sin embargo, hay otro factor que puede ser igualmente crucial en determinar la gravedad de los daños en caso de un atropello: la altura del automóvil.

Según estudios recientes, la altura del vehículo puede influir en la manera en que se distribuye la fuerza del impacto en el cuerpo del peatón, lo que puede afectar gravemente la gravedad de las lesiones. En particular, los vehículos más altos, como los SUV y los camiones, pueden causar daños más graves que los vehículos más bajos, como los sedanes y los hatchbacks.

Esto se debe a que los vehículos más altos tienen un centro de gravedad más alto, lo que puede hacer que el impacto se produzca en una parte más vulnerable del cuerpo del peatón, como la cabeza o el torso. Además, la altura del vehículo también puede influir en la manera en que se distribuye la fuerza del impacto en el cuerpo del peatón, lo que puede hacer que las lesiones sean más graves.

Por otro lado, los vehículos más bajos tienen un centro de gravedad más bajo, lo que puede hacer que el impacto se produzca en partes menos vulnerables del cuerpo del peatón, como las rodillas o los piernas. Esto puede reducir la gravedad de las lesiones y hacer que el peatón tenga más probabilidades de sobrevivir al accidente.

Es importante destacar que la altura del vehículo no es el único factor que influye en la gravedad de las lesiones en caso de un atropello. La velocidad del vehículo, la condición de la carretera y la presencia de elementos de seguridad, como airbags y sistemas de frenos antibloqueo, también pueden jugar un papel importante.

Todavía más importante es que este conocimiento puede ser utilizado para desarrollar estrategias de seguridad más efectivas y reducir el número de accidentes de tráfico que involucran a peatones. Las autoridades de tráfico y los diseñadores de vehículos pueden trabajar juntos para crear vehículos más seguros y reducir la gravedad de las lesiones en caso de un atropello.