En la reciente cumbre de presidentes del G20, la diplomacia argentina se movió rápidamente para no quedar excluida de una importante alianza multilateral.
El presidente argentino, Javier Milei, decidió unirse a la 'Alianza Global contra el Hambre', una iniciativa propuesta por el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva.
Esta decisión no fue anunciada públicamente con antelación, lo que generó sorpresa entre los asistentes a la cumbre.
Según fuentes diplomáticas, la decisión de Milei de unirse a la alianza se debió a la necesidad de mantener a la Argentina dentro del bloque multilateral, integrado por 80 países.
La 'Alianza Global contra el Hambre' tiene como objetivo principal luchar contra la desnutrición y la malnutrición en todo el mundo.
La adhesión de Argentina a esta alianza puede considerarse un paso importante hacia la cooperación internacional para abordar problemas globales.