Los problemas para las aplicaciones de viajes como Didi y Uber en los aeropuertos mexicanos, especialmente en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), parecen interminables. Sin embargo, la Secretaría de Marina de México, a cargo de la operación de muchos de los aeropuertos del país, ha anunciado que trabaja en una propuesta de regulación que busca encontrar un "térmíno medio" entre los taxistas tradicionales y los conductores de estas aplicaciones.
Especialmente en el AICM, los usuarios de estas aplicaciones han tenido que enfrentarse a problemas como el cierre de las áreas de recogida de pasajeros y la imposibilidad de abordar los vehículos dentro de las instalaciones del aeropuerto. Esto ha llevado a que los usuarios tengan que hacer largas caminatas para llegar a las áreas designadas para abordar los taxis de aplicaciones, lo que ha generado quejas y preocupación por la seguridad de los pasajeros.
La Secretaría de Marina, liderada por el almirante Rafael Ojeda, ha indicado que se está trabajando en una propuesta de regulación que busca encontrar un equilibrio entre los intereses de los taxistas tradicionales y los conductores de aplicaciones de viajes. Esto se debe a que los problemas en el AICM no son aislados, ya que se están replicando en otros estados del país, especialmente en Quintana Roo, donde los taxistas han defendido con firmeza su exclusividad de operación en importantes puntos turísticos como Cancún.
La propuesta de la Secretaría de Marina busca resolver los problemas de acceso y seguridad que enfrentan los usuarios de aplicaciones de viajes en los aeropuertos mexicanos. Mientras tanto, la situación sigue siendo complicada para los usuarios, que deben seguir abordando los taxis de aplicaciones en áreas designadas fuera de las instalaciones del aeropuerto, lo que puede ser peligroso y poco conveniente.
En este momento, no se tienen más detalles sobre la propuesta de regulación que está trabajando la Secretaría de Marina, pero se espera que esto pueda ayudar a resolver los conflictos entre los taxistas tradicionales y los conductores de aplicaciones de viajes.